Números: Se llama así porque comienza con el censo estadístico del Pueblo de Israel.
Su nombre original en hebreo es Bemidbar (בְּמִדְבַּר) : En el Desierto.
Números nos da un registro oficial del viaje de Israel desde el Monte Sinaí hasta Moab. Dios demostró su fidelidad al pueblo escogido. Se mencionan dos acontecimientos. La rebelión de Korah, un Levita, que desafió la dirección de Moisés y de Aaron. El segundo acontecimiento siguió a la rebelión de Korah. Cuando la rama de Aaron floreció y produjo las flores y las almendras maduras.
Números esta conectado con los viajes en el desierto de Israel. Es el registro oficial del viajes desde el Monte Sinaí hasta Moab. Es una clara ilustración de la fidelidad de Dios hacia su pueblo y de la responsabilidad del hombre de vivir en El por fe. El pueblo de Dios debe caminar por fe. Dios juzgo a Israel de acuerdo a los días que ellos anduvieron en el desierto, por cada día que debieron caminar, Dios los hizo andar un año, totalizando casi 40 años en todo su viaje. Su divina gracia es vista en la provisión de la serpiente de bronce sugiriendo una mayor provisión de Dios en la Cruz de Jesús. Su divina presencia es vista en la columna de fuego y en la nube. y la provisión de Dios es vista en la provisión diaria del mana para alimento y en la roca que proveía el agua. Cada una de estas provisiones prefigura la venida del Señor Jesucristo.
El libro revela el proceso doloroso de la prueba y maduración mientras Dios enseña a su pueblo las consecuencias de la rebelión y del caminar por vista más bien que por fe. El pueblo de Dios puede moverse adelante solamente mientras cuando ellos dependen de él. El juicio divino de un Israel incrédulo es también prominente en Números.
